La bodega está situada en el municipio de Eisenstadt-St. Georgen, en la región vinícola de Leithaberg, en Burgenland (Austria). La empresa familiar se menciona por primera vez en un documento de 1648. La antigua explotación agrícola mixta se transformó en 1961 en una explotación puramente vitivinícola. Desde 1987, sólo se producen vinos de calidad. Los viñedos abarcan 20 hectáreas en las zonas de Angerl, Flachgraben, Gartenacker, Jungfrau, Hochberg, Huszarl, Kogel, Lehmgrube, Obere Hurt y Viehtrift. Están plantados en un 60% con las variedades tintas Zweigelt, Blaufränkisch, Cabernet, Sauvignon, Cabernet Franc, Merlot y Syrah, y en un 40% con las variedades blancas Welschriesling, Pinot Blanc, Chardonnay y Sauvignon Blanc. Se practica una viticultura natural con protección integrada de las plantas y fertilización reducida al mínimo. Los criterios de calidad son los portainjertos de crecimiento más débil, el aclareo y el cuidado selectivo del follaje con el fin de reducir el rendimiento.
Tras un prensado suave y una fuerte clarificación previa del mosto, se lleva a cabo una fermentación a temperatura controlada en acero inoxidable. Dependiendo del tipo deseado, los vinos maduran en depósitos de acero, grandes barricas de madera o barricas. Una característica especial es el embotellado de vinos individuales en botellas de gran formato (1,5 l, 3 l, 5 l, 9 l, 12 l, 18 l). Entre los vinos de alta gama se encuentran el vino blanco base "Scheibenberg" (Chardonnay, Pinot Blanc), Blaufränkisch de Leithagebirge, Syrah, el vino tinto base "V.T.S." (Vintage Top Select de Zweigelt, Blaufränkisch, CS, Cabernet Franc, Syrah), así como Merlot. También se producen aguardientes finos (orujo, levadura, vino), vinos frizzantes y espumosos fermentados en botella. La bodega es miembro de la asociación Vinology. Hans Moser se ha hecho cargo del cuidado de la vid Mater Veltlinis (St. Georgen), la variedad madre de Grüner Veltliner, descubierta en 2000.
